«A menudo, lo que más recuerdas de tu pasado son gestos y detalles mínimos: la camiseta de Snoopy disfrazado de cantaor flamenco de aquella persona que te atendió en la copistería, una pintada en el autobús que te llevaba al colegio que decía "yo no pedí nacer", o cómo llovía una vez que bajaste a por el pan hace quince años. Este cómic está compuesto de esos detalles. Keiler Roberts nos cuenta lo que le pasa y nos hace sentir todo lo que se puede sentir con su mundo de ardillas, ventiladores sucios, pájaros, calma y silencio, narvales, amigos imaginarios que nos dicen que la vida tiene sentido, risa de largo recorrido, perros, depresión y Muñecas Repollo. Keiler es esa persona con la que cruzas la mirada y te da la risa porque sabes lo que está pensando, o te das cuenta de que está triste porque se parece tanto a ti. La vida entera se explica en la escena en la que le compra un helado a su hija de camino al dentista. Todas las personas habitamos en los gestos mínimos. Estas páginas contienen la cantidad de oscuridad necesaria para que entendamos la importancia de la luz.» JORGE DE CASCANTE

«Roberts no cuenta una historia, sino que revela las partes de la vida que quedan fuera de las historias. Momentos lentos pero breves que en realidad no van a ninguna parte pero que tienen, en el fondo, un toque de humor y carácter, que cuando se expresan juntos a lo largo de un libro crean un sentido más fuerte y real de una persona que lo que la mayoría de las narrativas tradicionales pueden lograr.» SOLRAD

«Roberts tiene la asombrosa capacidad de ralentizar el tiempo y concentrarse en los momentos más pequeños... Mi tabla de súplicas es un retrato refrescante e íntimo de la vida familiar.» NPR, Books We Love 2021

«Me encanta la forma en que Keiler Roberts usa los cómics del día a día para dotar los momentos pequeños y descartables de la dignidad y el peso de los más grandes.» LIANA FINCK, New York Times

«Una de las humoristas más sobresalientes del cómic.» The A.V. Club

«¿Qué más se puede pedir a alguien que cuenta la historia de su vida?» Chicago Tribune, Mejores memorias y biografías de 2021

«Las memorias gráficas de Keiler Roberts captan la experiencia de ser madre, artista y escritora mejor que cualquier libro que haya leído. No hay cliffhangers o lecciones de vida. Se trata más de la textura de estar vivo: la melancolía, su inevitable sentido de soledad y los pequeños placeres inesperados.» ROZ CHAST

«Keiler Roberts es honesta y hábil mientras esquematiza el dolor inherente a la memoria, pero es la forma idiosincrásica de Roberts de abrocharte en su brillante, incómoda e increíblemente divertida alma la que te eleva por encima del suelo.» EMIL FERRIS

«Una colección de pequeños fragmentos de cotidianeidad inane que pueden encerrar tanto la ridiculez como la genialidad (a veces simultáneamente) y hacerte reir de absurdo cómico para acabar llorando de puro absurdo existencial.» BAMF!

«La memoria puede ser un ejercicio de catarsis dolorosa, pero en manos de Keiler Roberts es una reflexión sobre la vida desde un humor tan sutil e imperceptible en su apariencia como demoledor en ese poso ácido que va haciendo camino hasta explotar. ¡Lectura fija!» ÁLVARO PONS

«Este cómic no solo nos acerca a la autora y nos congracia con ella y los "personajes" de su familia, sino que en cierta manera nos reconcilia con nuestro propio presente.» LAURA FRANCO, Librería La Central

«La fortaleza de este libro reside precisamente en encontrar la maravilla en todos esos momentos, en transitar por sus páginas y saber apreciar una vida que podría ser la mía o la vuestra, y en reconocer, al final, que esa vida tiene sentido.» LAURA MADRONA, MondoSonoro